Alianzas militares - pág.4

Indice General | Enciclopedia de Milicia

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Para que la alianza pueda ser eficaz y operativa deben quedar definidas las circunstancias por las que entrará en funcionamiento. Ello implica no sólo la coordinación de las acciones políticas, sino la adopción de medidas militares. Las alianzas suelen limitarse en el tiempo y el espacio y, en general, se establecen las pertinentes prórrogas y renovaciones. Tal es el caso de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), integrada por la mayoría de los países europeos occidentales, los Estados Unidos y Canadá. Casi todas las modernas alianzas incluyen cláusulas que comprometen a los integrantes a no firmar tratados, ni la paz, con el enemigo por separado del resto. A lo largo de la historia se han repetido casos en los que la evolución de los acontecimientos ocasionó la "inversión de alianzas". Así, la Unión Soviética firmó en 1939 un pacto con el gobierno nacionalsocialista alemán. Sin embargo, en 1941 firmó el pacto anglo-soviético contra Alemania, que había invadido su territorio. La seguridad colectiva Según las interpretaciones de algunos analistas, las alianzas, como las armas, no causan la guerra sino que suelen ser su síntoma. Posiblemente una alianza universal conseguiría la paz general; pero la existencia de dos conceptos antagónicos de paz, por ejemplo el de las democracias occidentales y el de los regímenes socialistas, convierte tal ilusión en imposible.