|
hepatitis crónica
chronic hepatitis
Digestivo
Inflamación crónica, persistente del hígado, de más de seis meses de evolución por distintas causas: virus (B, C y D), principalmente, fármacos, alcohol, procesos autoinmunes o metabólicos y otros desconocidos. Puede evolucionar favorablemente o conduce a una cirrosis. Puede ser hepatitis crónica persistente, que en la biopsia del hígado presenta una inflamación localizada alrededor del área portal, pero no se extiende al parénquima hepático. Hepatitis crónica activa, en donde la inflamación afecta no solo al área portal, sino también al parénquima, produciendo necrosis. Generalmente aparece tras hepatitis agudas.
hepatitis fulminante
fulminant hepatitis
Digestivo
Forma poco frecuente de hepatitis, que en ocasiones es mortal, en pocos días, por una rápida necrosis masiva del hígado, que es causada por virus, tóxicos o isquemia. Se le denomina atrofia aguda amarilla del hígado. Se manifiesta, desde el punto de vista clínico, por precoma hepático, insuficiencia grave hepato-celular, alteración de la coagulación, insuficiencia renal y coma.
hepatitis viral A
HAV
Digestivo
La llamada también hepatitis epidémica e infecciosa está producida por el virus A de la hepatitis. Se caracteriza por una sintomatología insidiosa. Afecta principalmente a niños y adolescentes, por la exposición al virus, que viene de una persona infectada o a través de alimentos o agua contaminada por heces infectadas. No existe el estado de portador crónico. Su mortalidad es muy baja y no evoluciona a la cronicidad. Puede producir grandes brotes epidémicos. Su distribución es universal, con ciertas zonas de mayor prevalencia. No hay tratamiento médico específico, pero sí se pueden hacer profilaxis: a) medidas de vigilancia epidemiológicas; b) medidas de salud pública; c) inmunoprofilaxis pasiva (gammaglobulina); d) inmunoprofilaxis activa (vacunas).
|