|
Los fauvistas habían iniciado sus contactos hacia 1892, cuando el más destacado de todos ellos, Henri Matisse, conoció, entre otros, a Albert Marquet, Henri Manguin y Charles Camoin, con quienes coincidió en la Escuela de Bellas Artes. A ellos se unieron luego André Derain y Maurice de Vlaminck y, más tarde, un grupo de artistas procedentes de El Havre: Othon Friesz, Raoul Dufy, Kees van Dongen y Georges Braque. De todos ellos, los más sobresalientes fueron Matisse, autor de "Mujer con sombrero" y "La raya verde", y Derain y Vlaminck, que pintaron numerosos paisajes con vivos colores.
Tras una etapa de formación, el grupo fauvista quedó perfilado en 1905 y desapareció tres años después ante la dispersión estética de sus componentes. En su evolución fue adoptando y asimilando las influencias de maestros postimpresionistas, como Georges Seurat, cuya técnica divisionista estuvo presente en los primeros cuadros, o Vincent van Gogh, visible sobre todo en la obra de Vlaminck, con su técnica de pincelada espesa y suelta. Más tarde, por influencia de Paul Gauguin, se aplicó el color en manchas planas y extensas y, ya al final, la lección de Paul Cézanne dio al movimiento una nueva orientación, más ordenada y sintética, que coincidió con su desmembramiento. Los fauvistas recibieron también influencias del arte primitivo y oriental.
|