Metalistería - pág.3

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Las técnicas decorativas de la metalistería incluyen además el repujado (modelado en relieve de láminas metálicas mediante un punzón o repujador), la cinceladura (talla con martillo y cincel, que también se emplea para cortar las partes de las piezas fundidas), el grabado, la incrustación, el esmaltado, la doradura, etc. El cobre El primer metal no precioso que utilizó el hombre fue el cobre. Por ser relativamente blando, es muy maleable. Su superficie se puede dorar, grabar y esmaltar, aunque no es adecuado para la fundición. Una de las obras más antiguas y hermosas es el relieve que decoraba la parte frontal de un templo en el yacimiento mesopotámico de Tell el-Obeid. En Egipto, la técnica del cobre alcanzó un alto grado de perfección. Persia, Grecia y Roma también dejaron hermosas muestras. Durante la edad media europea se fabricaron objetos litúrgicos de cobre, generalmente con una profusa decoración en forma de engastes, dorados y esmaltes. Desde la segunda mitad del siglo XVI comenzó a usarse cada vez menos el cobre para fines eclesiásticos al ser sustituido por la plata.