Técnicas Pictóricas - pág.4

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Por último, se aplica sobre la pintura acabada un barniz o capa de carácter resinoso para protegerla, aumentar sus efectos lumínicos y matizar el brillo. El principal problema del barniz es que tiende a amarillear con el paso del tiempo, con lo que se modifica la calidad de la pintura. Ordenación de las técnicas pictóricas Según los aglutinantes y diluyentes empleados, se pueden dividir las técnicas en tres grupos, que tienen como base el agua, el aceite o las resinas. Técnicas con agua. Una de las técnicas con agua más difundidas es la acuarela, que emplea un pigmento en polvo mezclado con goma arábiga y diluido en agua. Se aplica sobre papel o cartón, con pinceles de pelo blando, y exige una rápida ejecución. Con ella se logran importantes efectos transparentes de luz y color, por lo que es muy apreciada por los pintores paisajistas. El gouache o aguada, al igual que la acuarela, se origina al combinar pigmentos con goma arábiga y luego diluirlos en agua, pero se trata de una pintura más densa y mate que aquélla. Es una técnica rápida y eficaz, que se aplica sobre todo en materiales como el papel, y suele emplearse para bosquejos de pinturas al óleo y cartones para tapices.