Carpintería y Evanistería - pág.3

Herramientas y accesorios
A medida que los trabajos en madera evolucionaron se crearon instrumentos cada vez menos toscos que permitían obtener mejores rendimientos. Las primeras herramientas se originaron en la edad de los metales, ya que el corte y labrado que se obtenía con hachas y punzones de piedra no pueden considerarse labores de carpintería. Así pues, de las edades del bronce y del hierro dataron las primeras azuelas, gubias, formones, clavos y barrenas.
A lo largo de la historia se han introducido sucesivas modificaciones tendentes a perfeccionar los instrumentos empleados en esta disciplina. De este modo se ha llegado a disponer de una amplia gama de herramientas especializadas. Para el corte se utilizan sierras, serruchos, hachas y punzones; para labrar y pulir se emplean formones, gubias, cepillos, limas, escoplos y escofinas, y para horadar la madera y clavar o desprender clavos se recurre a berbiquíes, barrenas, tenazas, alicates y destornilladores. A estas herramientas, destinadas al trabajo directo sobre la madera, hay que añadir una amplia serie de instrumentos que en el taller de carpintería se emplean para fijar o desplazar piezas, encolar superficies, revestir con tejidos y otras diversas labores. A este respecto cabe mencionar, entre otros muchos accesorios, las prensas, los troqueles, las planchas, los pinceles y los diferentes tipos de colas.