Almeja - pág.2

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La respiración la efectúan por medio de branquias, dispuestas en forma de laminillas; estos órganos también intervienen en el proceso de nutrición. La concha presenta una serie de estrías que marcan las diferentes líneas de crecimiento de la misma. En la cara interna hay un par de masas carnosas de forma cilíndrica que al contraerse aproximan las dos partes de la concha hasta cerrarlas. Las valvas se articulan por medio de dientecillos que constituyen la llamada charnela. El desplazamiento se produce por la acción de una masa musculosa denominada pie, aplanada y en forma de hacha. Los sexos suelen estar separados y la fecundación es externa. El huevo da lugar a una larva con forma de trompo denominada trocófora, que está provista de una serie de cilios o pelos por medio de los cuales se desplaza. A continuación se desarrolla un nuevo estado larvario de aspecto similar al del adulto, la larva velígera, que se fija y crece hasta dar lugar al individuo definitivo. Las almejas son apreciadas por la suavidad de su carne, aunque en relación con la gran diversidad de especies son pocos los tipos comestibles.