Telecomunicación - pág.5

Indice General | Enciclopedia de Comunicación

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La función primordial del elemento transmisor consiste en adaptar las características del mensaje fuente al canal de comunicación. Para ello, dispone de un codificador, útil sólo cuando se emplea transmisión digital, es decir, se filtra y se transforma totalmente el mensaje para convertirlo en sucesión de bits; y un modulador que asigna y distribuye de forma óptima los mensajes a lo largo del canal mediante la modificación de las propiedades de la onda soporte de la transmisión y la superposición de varios mensajes diferentes sobre el canal. Por último, el receptor dispone de un demodulador que reconvierte los impulsos recibidos en el mensaje analógico o digital original; un decodificador, traductor necesario en caso de transmisión digital; y un procesador final que interpreta los datos. La comunicación en dos sentidos simultáneos requiere la presencia en ambos terminales de un modulador-demodulador de señales o módem, convertidor de los mensajes a impulsos admitidos por las características del canal. La preocupación básica de los sistemas de telecomunicación consiste en conseguir que todas las operaciones destinadas a reproducir por medios electrónicos los mensajes de partida no afecten a la calidad de la recepción ni produzcan altos índices de interferencias o ruidos, especialmente en los casos que requieren alta fidelidad.