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El estado posee el 95 % de los bosques, especialmente densos en la zona del Himalaya.
La agricultura, la industria forestal y la pesca aportan, aproximadamente, un tercio del producto interno bruto y son la fuente de vida de la gran mayoría de la población. Las principales cosechas de cereales, productos básicos en la alimentación de un pueblo en buena medida vegetariano, son el arroz, que cubre una tercera parte de la superficie dedicada a la producción de grano; el trigo, en expansión por la proliferación de pozos artesianos en el Panjab; y, en menor medida, el maíz, el mijo y el ragi (cereal forrajero). Otros cultivos importantes son los de caña de azúcar, algodón, yute, té, café, caucho y tabaco. Predomina la agricultura de tipo tradicional, condicionada por la escasez de agua y de créditos. La pesca, a pesar de su enorme potencial, está insuficientemente desarrollada.
Aunque la India tiene la mayor cabaña ganadera del mundo, su rendimiento en leche es extremadamente bajo y, además, el consumo de carne está prohibido por la religión hindú, predominante en el país. El búfalo es el principal productor de leche, seguido del ganado bovino o vacuno; sólo un 5 % procede de cabras, ovejas y camellos. Los indios obtienen también lana de sus rebaños de ovejas, cuyo rendimiento productivo es bajo.
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