CROMWELL, OLIVER

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Hombre inteligente, enérgico y de firmes principios religiosos, Oliver Cromwell destronó a la dinastía de los Estuardo e instauró un régimen republicano en Inglaterra. Oliver Cromwell nació en Huntingdon, en el este de Inglaterra, el 25 de abril de 1599. Se formó en un medio protestante puritano y fuertemente anticatólico. Movido por una inquebrantable fe, fruto de su profundo conocimiento de la Biblia, llegó a considerarse el instrumento de Dios en la Tierra. Elegido miembro del Parlamento en 1628, se distinguió por su vehemencia en la defensa del puritanismo y por sus ataques a la jerarquía de la Iglesia de Inglaterra. En 1640, Cromwell representó a Cambridge en el Parlamento. Se unió al ala radical, que atacaba duramente la política del rey Carlos I. Cuando en 1642 comenzó la guerra civil, que enfrentó a los partidarios del rey (realistas) con los del Parlamento, Cromwell se empezó a dar a conocer no sólo como fogoso orador, sino también como un hombre práctico, poseedor de extraordinarias dotes de organización y mando. Cromwell abogó por la reforma del ejército del Parlamento, dotó a su cuerpo de caballería de una rígida disciplina y consiguió que, en 1643, la causa parlamentaria triunfase en las regiones orientales de Inglaterra, mientras fracasaba en el resto del país. Hizo que se aprobara una norma por la cual los miembros de las cámaras quedaban excluidos del mando del ejército.