Embalse - pág.7

Indice General | Enciclopedia de Industria e ingenierí­a

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Los primeros eran simples estructuras homogéneas de masas terrosas y, sucesivamente, se fueron introduciendo subdivisiones con distintas capas integradas por materiales apropiados a cada zona. El embalse de tierra desvía el peso horizontal de la presión del agua hacia la construcción. La presión resultante no debe causar excesiva deformación. Los agregados que constituyen estos embalses presentan un límite de resistencia a la penetración del agua. A este respecto, la magnitud de la penetración depende de la presión ejercida por el agua en la presa, de la longitud del embalse y de la permeabilidad de los materiales de construcción. Así, por ejemplo, las rocas que proceden de arcillas sustancialmente impermeables tienen una inadecuada resistencia al movimiento del agua. Un embalse de tierra ha de ser estable por sí mismo. Su lado inclinado no debe deslizarse ni resbalar; también debe evitarse la licuefacción del suelo, así como su erosión debido al lavado de los materiales. Las dimensiones de los embalses varían dentro de amplios márgenes, aunque, obviamente, los de tierra se ubican tan sólo en cauces reducidos.